septiembre 2, 2016
Muchas veces me he preguntado porqué vemos el miedo como un enemigo, estorbo, obstáculo; miro a mi alrededor y veo como muchas cosas están edificadas desde y por el miedo. Podría entonces el miedo ser un motor para crear, para mover, para transformar? No solo paraliza…también nos mueve?
Establecer un diálogo con el miedo es un ejercicio interesante….
En mi caso me he dado cuenta que muchas veces el miedo es la prudencia frente a ciertas cosas o me alerta para reflexionar y darme cuenta de otras.
Para poderlo entender vi y entendí que la vida está hecha de contrastes, de blancos y negros, de agradables y desagradables que la decoran y la pintan….
Si pretendemos que todo sea de un solo color y sobre todo del color que nos enseñaron como el adecuado, entraremos en estados de profunda ansiedad y desasociego….pero si vemos la vida pintada con diferentes colores y contrastes nos damos cuenta que tanto el miedo como la paz son parte de la vida y ambos nos mueven e impulsan a crear y vivir.
Cual es la clave? Evitar identificarnos con los dos, que somos el uno o el otro, mas bien son visitantes que vienen y van, estados de la mente que permanentemente cambian y con nuestro observador espititual, que no juzga, logramos que ni uno ni el otro se ancle en nuestro ser.
Así el miedo es simplemente un estado igual que la paz, el uno es desagradable y el otro es agradable.
Buscar sin cesar la paz y huir del miedo nos paraliza y bloquea…
Mirar el miedo sin juicio va desimportaculizando y disminuyendo la carga que tiene la situación y podemos ver lo que nos quiere decir.
El miedo construye como la paz….pero lo que se construye desde el miedo tiene bases débiles…al igual que lo que se construye desde una paz que huye del miedo.
Construir y crear desde un miedo y una paz que se han neutralizado genera bases firmes y armónicas que se verán con el tiempo.
La felicidad verdadera no depende de buscar la paz y huir del miedo, buscar lo agradable y huir de lo desagradable. Es convivir con las dos sin juicio….fluidamente como el agua en el río.
Los invito a danzar con los contrastes de la vida, sacando el mejor provecho del miedo como de la paz y pintar de diferentes colores y tonalidades nuestra existencia!
Miren esta belleza de contraste que nos brinda la naturaleza!
