Principios fundamentales de la Medicina Funcional
Comprensión de la individualidad bioquímica de cada ser humano, basada en las interacciones entre los conceptos de genética y el caracter único del medioambiente.
Conciencia de las evidencias que soportan una propuesta terapéutica centrada en el paciente, no en la enfermedad.
Busqueda del equilibrio dinámico entre los factores internos y externos del cuerpo, mente y espíritu del paciente. Familiaridad con las redes que conectan los factores fisiológicos internos.
Identificación de la salud como vitalidad positiva – no sólo la ausencia de enfermedad – enfatizando esos factores que favorecen una fisiología vigorosa. Promoción de las reservas orgánicas como manera de aumentar la magnitud de la salud, no solamente la longevidad, de cada paciente.